Érase una vez que Luis se iba de viaje a París. Necesitaba una mochila ligera, cómoda y muy fácil de guardar, pues pensaba llegar hasta allí en avión, casi sin equipaje, y patearse la ciudad. Por supuesto, la mochila tenía que ser completamente única. Por eso, Luis eligió unas telas y diseñó un patrón. Las manos (y la máquina de coser, jeje) de Mercedes la hicieron realidad y voilà, aquí está el resultado:
A Luis le gustaron mucho las telas de la colección Danscapes Architectural ... por qué será ... y con ellas dibujó un patrón de triángulos para esta mochila tipo saco. La mochila está rematada con piezas de cuero que, además de quedar estupendamente, la hacen más resistente. Las asas son de cuerda.
Y aquí están algunos de los lugares que ha visitado la mochila durante su primer viaje. ¡Le esperan muchos más!
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| En Amiens |
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| En la cafetería de Amelie en París |
He enlazado este post con la fiesta de enlaces del blog Personalización de Blogs, para que la mochila siga viajando :)
Ha quedado muy chula!! Se nota el toque del arquitecto ;)
ResponderEliminarMe encanta, se ve de lo más cómoda y original. :)
ResponderEliminarAna
Muchas gracias a las dos, nos gusta que os guste :)
ResponderEliminarEs preciosa! Qué buena idea! Me encanta el toque Amelie de la mochila viajera!
ResponderEliminarBonita la mochila y bonita la historia...
ResponderEliminarBesitos y feliz fin de semana
Es divina!, y super super super practica, lo mejor!
ResponderEliminar¡Gracias por vuestros comentarios chicas! Me alegro que os guste :) La verdad es que sí que es un diseño práctico porque es muy ligero.
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